5 formas de aprovechar la Supercopa de España
Ya que el Valencia CF no va a darles plantón y va a acudir a Yeda, haciendo un ejercicio de valentía podrían aprovechar el viaje para protestar y/o hacer más divertida este esperpento de competición a la que los aficionados no pueden asistir. Admitiendo de antemano que son más fruto de la imaginación, por qué no divertirnos pensando en estas utópicas posibilidades.
-
Llevar al juvenil. A muchos se nos ha ocurrido esta posibilidad. Por contrato están obligados a llevar a un número concreto de jugadores del primer equipo, pero bastaría con llevar el mínimo establecido, asumir la multa/descalificación a posteriori o emplear una táctica más vieja que el balompié: simular lesiones de tus jugadores clave. Con esto mostrarías lo poco que te interesa la competición, darías minutos a tus jóvenes promesas y mandarías un dardo a los rivales invitados con la Ley de la sorpresa.
-
Sentada. Sería para guardar en la hemeroteca, y un meme más que viral, el rostro de Rubiales cuando los once jugadores blanquinegros sobre el césped del Rey Abdullah se quedaran inmóviles, o incluso se sentaran, tras el pitido inicial. Si no hay premio justo para el ganador de Copa, no hay espectáculo por parte del campeón.
-
Jugar solo contra el Barcelona. Esta es la más irreal, pero puestos a soñar, tiramos de inventiva. Ignorar la semifinal y presentarse directamente en la final. Sería provocador, pero muy divertido. No haría falta llegar al extremo de Douglas McArthur, oficial del ejército americano, que cuando no dejaron pasar a su equipo al estadio olímpico en Amsterdam 1928 derribó la puerta con un ómnibus. Bastaría con saltar al campo y crear confusión, obviamente estaríamos eliminados por no presentarnos contra el Real Madrid, pero el acto simbólico estaría hecho. Para esto el Barça tendría que ganar su semifinal previamente (o hacer lo mismo que nosotros).
Como opción alternativa a esta, podrían jugar ambos en el Estadio Príncipe Abdullah al-Faisal (en la misma ciudad) o en Raid, en el Estadio Internacional Rey Fahd, donde suele jugar la selección de Arabia Saudí, que es aún más grande. Y dejar a los conjuntos de la capital disputar el torneo oficial de la RFEF.
-
Presentarse con el Valencia Femenino. Mi opción favorita, a las protestas anteriores por el reparto económico y los partidos extra, le sumaríamos una más importante: mujeres jugando a fútbol en un país que está muy lejos de respetar los Derechos Humanos de muchos colectivos. Mari Paz, Nicart y compañía dejarían a más de uno sentado.
-
Drinking Game. La única posible. Personalmente optaré por no ver los partidos, pero para los que lo vayan a ver por la televisión esta es una opción más atractiva: siempre y cuando beban alcohol. Consiste en establecer una serie de reglas y, cuando estas se cumplan, pegarle un trago (o un chupito) a la bebida seleccionada. Os dejo una a modo de ejemplo.
¡Amunt València!